La biotecnología es “la aplicación de la ciencia y la tecnología a organismos vivos y a partes, productos y modelos de los mismos, para alterar materiales vivos o no vivos para la producción de conocimientos, bienes y servicios”, según la define la OCDE y recoge el VI Plan Nacional de I+D+i 2008-2011.
Este plan introduce la biotecnología como una de sus cinco acciones estratégicas y afirma que “aglutina varias disciplinas como agricultura, biología, bioquímica, genética, ingeniería, medicina, microbiología, química, veterinaria, etc.» y se alimenta y codesarrolla gracias a disciplinas complementarias como las relacionadas con las ingenierías, los materiales y las micro y nanotecnologías, entre otras”.
La Unión Europea, por su parte, ha diferenciado los ámbitos a los que se dedica esta ciencia, dando lugar a cuatro tipos de biotecnología:
- Roja: dedicada al sector farmacéutico y sanitario
- Blanca o industrial: aplicada a la producción de productos químicos, nuevos materiales o energía
- Gris, dirigida a la preservación ambiental.
- Verde: centrada en el sector agroalimentario.
Biotecnología verde
El sector de biotecnología verde o agroalimentaria se divide en biotecnología agrícola, orientada a los procesos de cultivo, y en biotecnología alimentaria, centrada principalmente en los alimentos.
El primer término hace referencia a la aplicación de técnicas biotecnológicas para mejorar los cultivos mediante utilización de la ingeniería genética para defenderlos frente a las plagas, el frío o la sequía, o el uso de biofertilizantes para el crecimiento y desarrollo de las plantas.
El segundo concepto se relaciona con las técnicas y procesos que emplean organismos vivos o sustancias para producir o modificar un alimento, mejorar las plantas o animales de los que provienen o desarrollar microorganismos que intervengan en su elaboración, como por ejemplo, los alimentos funcionales, como los probióticos y prebióticos.
Nunca ha existido una oferta alimentaria tan variada, segura y de tanta calidad como la actual
Biotecnología moderna vs tradicional
El objetivo de ambos conceptos, moderno versus tradicional, es el mismo: la optimización de las propiedades, la mejora nutricional o el aumento de la viabilidad del cultivo de los alimentos. La diferencia radica en la técnica que se utiliza para lograr ese perfeccionamiento.
La biotecnología tradicional se basa en la utilización de procesos para el perfeccionamiento genético de las especies como son el cruzamiento y la selección de individuos haciendo uso de los genomas completos. Si a esto se le suma la aplicación de la ingeniería genética, el resultado es la Biotecnología moderna.
De este modo, se trabaja de una forma más controlada con los genes aislados, obteniendo ventajas antes inimaginables. Además de controlar y conocer mejor la modificación genética que se ha introducido y de obtener resultados más rápidamente, es posible “saltar la barrera de la especie”.
Este nuevo concepto, recogido en el documento editado por Sebiot, “Biotecnología y alimentos. Preguntas y respuestas”, se refiere a que es posible introducir genes útiles de un alimento, como por ejemplo la fresa, en otro alimento con el que no sería factible cruzarlo, como la patata, para mejorar sus características.
¿Es segura la biotecnología?
Nunca ha existido una oferta alimentaria tan variada, segura y de tanta calidad como la actual. Actualmente, existen normas que reconocen la potencia de estos nuevos métodos para garantizar la calidad, la trazabilidad y la seguridad alimentaria.
En España, como en el resto de países miembros de la Unión Europea, existe una autoridad nacional que se encarga de la seguridad alimentaria. Esas labores de control son ejercidas por el Ministerio de Sanidad y Consumo, a través de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), y el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, además de los organismos de comunidades autónomas, ayuntamientos y corporaciones locales.
La legislación española más reciente es la Ley 17/2011, de 5 de julio, de Seguridad Alimentaria y Nutrición, que establece que solo se pueden comercializar alimentos y piensos que sean seguros en condiciones de uso normales, a la que se suma el Plan Nacional de Control Oficial de la Cadena Alimentaria 2011-2015.
En la Unión Europea, los encargados de esta labor de control son la Dirección General de Salud y Consumidores (Dgsanco), la Food and Veterinary Office (FVO) y la European Food Safety Authority (EFSA), organismos con un mismo objetivo, que no es otro que el de velar por la seguridad alimentaria de los ciudadanos europeos.
Empresas españolas de biotecnología
El Grupo de Trabajo de Alimentación de la Asociación Española de Bioempresas (Asebio) ha elaborado un pipeline de biotecnología alimentaria.
En él se integran 63 productos, servicios o tecnologías biotech destinados a la industria de la alimentación, de las cuales 37 ya se encuentran disponibles en el mercado.
Las nueve empresas son Algaenergy, Instituto Biomar, Biopolis, Biosearch, Ingenasa, Laimat, Seprox Biotech, Ingredientis Biotech y Vivacell, a las que se suma el Centro Tecnológico Leitat.
En el documento se incluye la información referente al producto, servicio o tecnología, su indicación o propiedades, la industria a la que va dirigida y las fases de desarrollo por las que ha pasado, como I+D, validación, registro, solicitud de patente y lanzamiento al mercado.
Origen de la biotecnología
El hombre dejó la vida nómada hace más de 10.000 años. Desde entonces, la recolección de frutos silvestres, la caza y la pesca dejaron paso a la ganadería y a la agricultura, generando así sociedades sedentarias.
Los primeros agricultores se sitúan en Oriente Próximo y se centraron en el cultivo de cereales como el trigo, la cebada y quizá el centeno. Por su parte, con la domesticación de las cabras y las ovejas, obtenían carne y leche, pudiendo con esta última hacer queso y mantequilla.
Es la biotecnología primitiva. Hace unos 7.000 años, los sumerios hacían uso de una biotecnología un poco más desarrollada, produciendo alimentos fermentados como vino, cerveza, pan, yogur o queso.
Más tarde, para conservar los alimentos se desarrollaron técnicas como la salmuera, el secado, el ahumado y la fermentación.
Esto prueba que la biotecnología no es algo novedoso.
Es un conjunto de técnicas utilizadas a lo largo de los años para influir en los alimentos: para su cultivo, conservación y para mejorar su apariencia y propiedades alimentarias.
Definiciones de biotecnología
- ORGANISMO MODIFICADO GENÉTICAMENTE (OMG):
Organismo cuyo material genético ha sido modificado de una forma que no se produce de forma natural por apareamiento o recombinación natural, sino que se diseña mediante técnicas de ingeniería genética. - ALIMENTO TRANSGÉNICO:
Es el elaborado a partir de un OMG o que contiene estos organismos, incluyendo los aditivos. Actualmente, hay tres plantas transgénicas: soja, maíz y colza, y un aditivo procedente de OMG, la ribofl avina, autorizados para su comercialización. - ALIMENTO PROBIÓTICO:
Contiene microorganismos vivos que ejercen algún efecto beneficioso sobre la salud más allá de sus propiedades nutricionales. Los más usados son los lactobacilos y las bifidobacterias, que se administran en alimentos fermentados como el yogur, o incluso en derivados cárnicos. - ALIMENTO PREBIÓTICO:
Contiene ingredientes no digeribles que estimulan el crecimiento o la actividad microbiana intestinal, como por ejemplo la fibra, los fructooligosacáridos, la inulina y la lactulosa.